marzo
ANDREU
LA VOZ DE ESPAÑA 22 -10-1941
El
Campeonato de España de la maratón fue ganado por el aragonés Monge
La salida anunciada para las dos y media de
la tarde, se retraso algo debido al examen medico previo de cada uno.
Ordenados estos en la línea de salida y
aparejados con su asistente ciclista se dio el pistoletazo de salida.
Desde un principio se ve que los “ases” salen
recelosos unos de otros, observándose a cada momento y esto da lugar a que el
pelotón de cabeza se mantenga entero durante demasiados kilómetros, llevando
como llevan un excelente tren de….carretera.
Así los tres de los cuatro marathonianos
improvisados de Guipúzcoa, van con los primeros. y hasta dos de ellos, Ferro y
Larrion, logran alcanzar, lanzándose valientemente en pos de Ramos, fugitivo
momentáneo quien desde el kilómetro 10 se había despegado con su suelto y
agradable estilo.
Dan cima al alto de Miracruz, Ramos vestido
de blanco entre los dos guipuzcoanos azules y así entran en San Sebastián
aplaudidos por el numeroso publico congregado en las calles de paso, asombrando de ver a los
suyos en tan preeminente lugar. La Avenida esta rebosante y anima a los
nuestros que sorprenden por su buen aspecto. El segundo pelotón formado por los
cinco aragoneses, Baro y otros, calma a 3,4, metros, Farro es despegado mas
adelante pero no así el compañero Larrion que sigue pegado a Liamos durante unos
kilómetros mas y también después de remiraselos Baro, Mongo y Salas que han
roto el segundo pelotón para dar alcance a los “lideres” de momento. En el
control de aprovisionamiento de Lasarte, Ramos aprovecha la corta parada de los
demás para escaparse resueltamente, aumentando el tren y llega a conseguir ventajas de 50 y 100 metros, pero
antes de Andoain es vuelto a alcanzar
por Monge y Baro. El campeón del año pasado, Salas, que se queja de la rodilla
resentida hace meses, ha sido dejado atrás. El trío Barros, Baro y Monge activa
la marcha pero ninguno se atreve a despegarse hasta que pasado el kilómetro 33
Monge acelera y toma cinco, diez, treinta, cincuenta metros e ir aumentando la
ventaja sin ser mas inquietado.
En la larga recta de Irura
(kilometro37),Ramos que ya había sido despegado también por Barò, se ve agotado
a parar hasta tres veces, pues su pierna no le responde.
Barò, a su vez es distanciado cada vez mas
por Monge que va con paso fácil y decidido hacia el triunfo, sonriendo
constantemente a la muchedumbre que repartida en ambos lados de la carretera le
aclama y le muestra su simpatía. Llega al estadio de Berazuol donde al pisar la
pista de ceniza da una arrancad que continua hasta la meta en estado fresquísimo.
El
orden de llegada fue el siguiente:
1º
Monge (Aragón), 3 horas 01 minutos 24 segundos 4`5.
2º
Salas (Aragón). 3- 05 - 29 4`3
3º Barò (Cataluña) 3- 11 –10
4`3
4º
Martín (Aragón). 3- 15 –21
4`5
5º
Monzon (Aragón). 3-21
--54 3`5
6º Fernández
(Guipúzcoa) 3-28- 56
7º Larrion (Guipúzcoa) 3-40 -58
8º
Arraco (Aragón). 3-47-16
Algunos
ligeros comentarios técnicos
No podemos deshacernos en elogios hablando de
la organización porque somos parte demasiado interesadas Sólo diremos que, como en ninguna parte, los
corredores estaban informados de manera natural, sin tener necesidad de
consultas constantes a sus seguidores en cada momento de la distancia
recorrida, pues cada kilómetro estaba marcado con una ancha línea en la
carretera con grandes números sobre los cuales irremediablemente tenían que
pasar los corredores.
La carretera fue cronometrada en cada punto
kilométrico.
No hubo ningún percance. Todos los
corredores, llegados y retirados, fueron examinados de nuevo por el doctor
Inareja quien registro estados fisiológicos consecuentemente normales.
Esto nos proporciona un amplio margen de
esperanza sobre las posibilidades de España en las carreras de largas
distancias siendo, hoy Aragón el semillero de corredores fuertes y tenaces.
Y las tres horas que tardo, en conjunto, el
primero no están tan mal. El derroche de arrancadas y demostración de reservas
que hizo Berazubi confirman que Monge debía haber entrado en 2 horas y 50
minutos.
El catalán Baro, uno de los favoritos por su
aureola de corredor especializado en los 20 Kilómetros decepcionó a no pocos.
El
vencedor
Monge no es ningún apaniguado dedicado
exclusivamente a correr ni esta “gobernado” a lo profesional. Es padre de
familia de tres hijos y tiene 41 años.
Es enganchador de vagones en la estación de Castejon. Al verle llegar a
la meta nos acordamos de los Campeonatos de España de atletismo de 1926, en los
termino segundo detrás del vizcaíno German Campo, batía el “record” de Castilla
(entonces soldado en Madrid) de los 10.000 metros… en este mismo viejo
Berazubi. Es un hombre de gran corazón
para la lucha y sobrio estilo; de estilo Marathoniano. Y en la ausencia del, hoy
por hoy, indiscutible Pérez el que se merecía el titulo, pero con mejor marca.
Su estado físico, a la llegada, perfecto teniendo la misma tensión arterial que
a la salida.
Otras
menciones
Salas, el campeón de España hasta hoy, ha
tenido el raro merito de que distanciado a los 23 kilómetros con perdida de
muchos puestos, por reproducírsele su
lesión de la rodilla, no solo no se ha retirados, sino que ha reaccionado de
tal manera que ha llegado al fin en un honroso segundo puesto.
Y de los cinco valientes corredores guipuzcoanos,
merecen mención especial Fernández y Larrion.
Y Larrion aun merece otro párrafo aparte.
Muchacho sin trabajo, de situación económica angustiosa no tuvo inconveniente
en ofrecerse y luchar con todos los “ases”, uno por uno, hasta bastante más
tarde que la mitad del recorrido y no cedió sino después de las lesiones de sus
no preparados, no siendo presa de la fatiga en todo el recorrido.
Fíjese en el un club que le pueda
proporcionar lo mas indispensable y Guipúzcoa tendrá un defensor como se merece
notabilísimo en el Creemos que no se debe dejar perder este positivo valor.
El catalán Font, que muchos le tenían por
vencedor probable, no existió en ningún momento
JOSE IGUARAN
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